martes, 27 de noviembre de 2012

Titicaca


22 de octubre, 2012
El lago navegable más alto del mundo, 3.800 msnm. 160km de largo por 60km de ancho. Es la cuna del Imperio Inca, Manco Capac y su esposa Mama Ocllo fueron rescatados por el Dios Sol, quien les otorgó la misión de fundar un imperio.
En el muelle de Puno tomé un barquito que da un recorrido de 2 días por las islas cercanas, el primer destino es Uros, una comunidad formada por 400 familias que viven sobre 40 islas flotantes. Los Uros construyeron sus casas sobre el agua para ser independientes del gran imperio, su estrategia funcionó ya que los Incas temían navegar sobre el gran lago porque de ahí salieron sus fundadores. Por eso, han logrado adaptarse, manteniendo vivas su cultura y costumbres, hablan Aimará y practican el trueque todos los domingos con los pueblos circundantes. Usan la planta totora para hacer sus embarcaciones y el suelo que los mantiene sobre el agua.
Después navegamos 3 horas a la Isla de Amantani, estando cerca, parece pirámide, ya que tiene gradas desde el nivel del agua hasta la parte más alta, son un tipo de terrazas que los nativos han hecho para cultivar, cada sección tiene aprox. 20 x 5 metros, después de la cosecha dejan descansar la tierra de usa sección más de un año y cambian a otra, así se recupera y es más fértil. Amantani tiene dos cimas, con los templos a Pachatata y Pachamama respectivamente. Subí al primero (4,150 msnm), en el camino hay portales en forma de arco, hechos de piedra, que sirven para desechar todo lo negativo y no contaminar el templo.
Me quedé en la casa de una familia, por 30 soles te dan un cuarto y comida, compartir su cocina y su tierra es demencial. En la isla no hay policía, son personas sumamente honestas y fieles a sus creencias, cuidan a sus animales y a sus plantas. Está prohibido tener perros o cualquier especie que ellos consideren de riesgo para el equilibrio de su entorno (en los museos de Perú he leído varias cartas que escribieron los conquistadores a los reyes de España, casi todas mencionan la calidad cívica que existía en esta cultura).
Al otro día me desperté a las 5:30, salí a caminar en lo que la “mama” preparaba el desayuno, vi a los pescadores y agricultores que comienzan a chambear desde que sale el sol. Regresé a mi “wasi” y a las 8 zarpamos hacia la isla Taquile se ve muy cerca, pero hicimos una hora. Ahí también hay arcos pero con los bustos de pobladores destacados, tienen costumbres muy estrictas, si una pareja se separa el castigo es tan duro que no hay registros de divorcios desde más de 6 años, si hay algún fallecimiento nadie se puede arreglar en todo el día, tampoco te dan la mano, es un insulto, se saludan intercambiando hoja de coca.
Mujeres y hombres son tejedores, usan 5 agujas, para hacer un chullo demoran hasta un mes. Las mujeres desde jovencitas guardan como tesoro el cabello que se les desprende al peinarse, después lo usan para tejer una faja que unen con otra que teje el hombre y las unen cuando se casan.
Fue una experiencia corta pero fastuosa, conocer gente que ha mantenido tantas cosas intactas durante tanto tiempo y que vive con hábitos y necesidades completamente ajenos a los míos me ha maravillado por completo.


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